Las 10 reglas de la innovación para escalar su empresa

1) Líderes Valientes

Como explica David Buruks en su artículo de Harvard Business Review, "la innovación no carece de ideas, sino del apoyo para hacerlas realidad", cuando la mayoría de las organizaciones intentan expandir sus esfuerzos para innovar, siempre parecen partir del mismo supuesto: "Necesitamos más ideas. "Empezarán a hablar de la necesidad de "pensar creativamente" para encontrar nuevas ideas que puedan convertirse en nuevos productos o negocios. Sin embargo, en la mayoría de las organizaciones la innovación no está limitada por la falta de ideas, sino por el hecho de prestar atención a las buenas ideas que ya han surgido. "LA INNOVACIÓN NO ES LA FALTA DE IDEAS, SINO EL APOYO PARA HACERLAS REALIDAD".

El laboratorio de investigación de Kodak inventó la primera cámara digital en 1975, pero no la desarrolló. En cambio, apenas prestaron atención mientras Sony desarrollaba un prototipo diferente y robaba el futuro de la fotografía digital bajo sus narices. Xerox diseñó la primera computadora personal, pero no invirtió lo suficiente en la tecnología y permitió que Steve Jobs con Apple aprovechara la oportunidad. Al final, no sólo se necesitan ideas, sino directivos con valor que apuesten por la innovación y creen mecanismos para que las ideas den sus primeros pasos y demuestren su valor en el mercado. No generamos ideas, generamos líderes. En un entorno en el que la incertidumbre es elevada y en el que las personas desempeñan su trabajo en función de resultados a corto plazo, se demuestra que se genera un entorno conservador, no apto para la innovación. La propia estructura piramidal de las empresas impide que las ideas más atrevidas y arriesgadas sigan adelante, detenidas por los directivos que no ven con claridad su éxito en el mercado o arriesgan demasiado su desarrollo. Una posible solución a este problema de "exterminio de ideas" es cambiar la estructura por la que deben pasar las ideas. En lugar de utilizar la jerarquía tradicional para descubrir y aprobar ideas, el proceso de aprobación podría ser extendido por toda la organización.

Ya hay varias empresas donde los propios empleados, además de poder aportar ideas, pueden votar a los mejores o directamente, en procesos gamificados, "invertir" en las ideas más brillantes. Además de la inversión, en varios casos los empleados también se ofrecen como voluntarios para trabajar en las ideas de los proyectos que apoyan. En algunas empresas, como Rite-Solutions, si una idea obtiene suficiente apoyo, el proyecto es aprobado y todos los que lo apoyaron reciben una parte de los beneficios generados por el proyecto. Ya existen varias empresas donde los empleados, además de poder aportar ideas, pueden votar por lo mejor, en procesos gamificados, e invertir en ideas brillantes. Este tipo de programas, el intra-emprendimiento y las inteligencias colaborativas, están generando muchos millones de dólares en nuevos productos y estrategias. Esta no es una solución de ideas; es una solución de reconocimiento creada por Líderes Valientes.

2) 10x Visión

Una sola frase, clara, poderosa y sencilla, que resume hacia dónde se dirige toda la organización: La Misión. La misión es el motor de la innovación, si la organización lo tiene claro, lo cree y se compromete a hacerlo posible, será el gas para la empresa. Lo primero de la innovación es tener ideas claras, hacia dónde queremos ir y cuáles son los objetivos que queremos alcanzar.

Google nos enseña que es más fácil multiplicar por diez (10x) que subir un 10%, ¡piensa en grande! Aunque todos sabemos que una carrera de 10.000 kilómetros siempre empieza con el primer paso: pensar en grande y empezar de a poco. Hay que ser capaz de diseñar planes ambiciosos, visionarios, transformadores, pero al mismo tiempo, ser consciente de que hay que cortarlos, crear las fases, asignar las personas y los recursos adecuados, en los momentos adecuados para cumplirlos. El papel de los líderes es diseñar la visión 10x; siempre con la mirada puesta en el presente y en el futuro: la innovación desestabilizadora.

3) Liderar a través de la cultura

Todos conocemos la famosa frase "la cultura come estrategia en el desayuno" y ya hemos visto en nuestra piel que es la verdad. Nunca podemos mover una organización por la fuerza, y cuanto más grande y madura sea, mayor será el esfuerzo. La innovación no es sólo una cuestión de presupuesto, la innovación es una cuestión de mentalidad y liderazgo. Para que la innovación fluya necesitamos que todas las facetas de la organización innoven, que comprendan cómo innovar y que tengan la capacidad de hacerlo. La innovación es una cuestión de compromiso y pasión. Las empresas más innovadoras del planeta se diferencian por tener el mayor nivel de compromiso de los empleados: se comprometen a crear un clima favorable para la innovación y a cuidar hasta el último detalle de la experiencia de sus propios empleados.

4) Trabajo, perseverancia y excelencia

Innovar no es tener una idea brillante de vez en cuando, es un trabajo diario. Innova es un trabajo constante, un camino largo, una carrera de larga distancia donde encontraremos muchas dificultades. Ningún producto funcionará en el primer intento; se necesita una mejora continua, revisión, cambio, requiere un trabajo diario, y ese es el secreto del éxito. La cuestión no es hacer todo bien, sino aprender rápidamente y marcar los siguientes pasos antes que los demás, estar dispuestos a hacer mejoras en todo momento y admitir que lo que habíamos pensado no. Era lo correcto.

Los retos a los que nos enfrentamos hoy en día son siempre más ambiciosos y complicados, por eso debemos buscar la excelencia. Para responder a los retos actuales, no sólo necesitamos ideas brillantes, sino también equipos de especialistas y centros de excelencia para desarrollarlas. Crear en su organización centros de excelencia, trabajando con metodologías ágiles (Design Thinking, Lean Startups, Agile) y con el mejor equipo posible que sea realmente capaz de pasar del laboratorio al mercado con éxito. No importa cuál sea el problema, la tecnología siempre será parte de la solución: lidera las tecnologías que realmente tienen el potencial para cambiar el mundo y cualquier negocio: Computación cognitiva (Big Data & Artificial Intelligence), Internet de las cosas, Blockchain, Economía Colaborativa, Ciberseguridad, Impresión 3D, etc. Ningún producto funcionará en el primer intento; necesita una mejora continua, la revisión, el cambio, requiere un trabajo diario, y ese es el secreto del éxito.

5) Las ideas están en todas partes: lleva a tu tribu, busca tus catalizadores

El principio básico de la innovación es estar abierto y receptivo a lo que sucede a su alrededor y saber cómo sacarle el máximo provecho. Tienes que involucrar a todas tus "Tribus" en tu proceso de innovación: Empleados, clientes, proveedores, expertos, etc. Necesitamos crear una plataforma para la innovación, crear un ecosistema alrededor de nuestra empresa, que nos ayude e inspire. Como dice Seth Godin: contar una historia, conectarse con una tribu, liderar un movimiento y hacer que el cambio suceda. Para acelerar el proceso de innovación, la clave fundamental es identificar los catalizadores de la innovación y los viralizadores de la innovación dentro de la organización para trabajar en la expansión de la innovación en toda la organización. Para identificarlos es muy fácil, en Opinno tenemos incluso herramientas automatizadas, intenta preguntar a 100 personas de tu organización: ¿Si tuvieras un proyecto de innovación con quién lo lanzarías? Si tuvieras una pregunta, ¿a quién se la harías? Si necesitas conectar con alguien de la organización que no conoces, ¿a quién acudirías?... verás que los nombres que se repiten serán 10/15, trabajar con ellos será todo más fácil.

6) Ser una plataforma

Con el mismo principio de apertura del punto anterior, busca ser su plataforma en la que otros innovan. El ejemplo claro y obvio son Google y Apple, son las empresas más innovadoras del mundo, especialmente por su capacidad para abrir plataformas de colaboración, para asegurar que cualquier persona del planeta con talento pueda aportar su grano de arena a uno de sus productos. Algo similar se ve en Linux o en las plataformas más "clásicas" como Goretex o P&G. Cuando el usuario ayuda a co-crear la fuerza de la inteligencia colectiva es imparable.

7) Inteligencia integrada

"El que golpea primero golpea doble". Esta frase se suele utilizar para situaciones que no son muy agradables, en la innovación es la misma. Tenemos que llegar antes que los demás para descubrir los océanos azules en nuestros mercados, para llegar a los océanos azules necesitamos y tenemos que estar constantemente escuchando, para poder anticiparnos a los demás. Necesitamos establecer mecanismos de escucha activa en el mercado que nos permitan identificar tendencias, tecnologías y datos que nos permitan anticiparnos a nuestros competidores. Necesitamos establecer mecanismos de escucha activa en el mercado que nos permitan identificar tendencias, tecnologías y datos que anticipen las acciones de nuestros competidores. Tenemos que desplegar una estrategia de escucha activa y no sólo mirar a nuestro sector, sino ver qué está pasando en el mundo en general, con especial atención al mundo tecnológico. Activar un equipo de vigilancia es esencial para poder innovar con éxito, así como para escuchar continuamente a nuestros clientes y tomar decisiones basadas en datos: Laboratorio de la Voz del Cliente.

8) Gestión Agile: nunca deje de fallar

Fallar en el mundo de la empresa (y en muchos casos en la vida) no es un problema, si aprendemos de ese fracaso, obtendremos información muy útil para seguir mejorando. Es importante cambiar nuestras creencias sobre el fracaso y lanzarnos a diversificar, probar, aprender y no esperar a un producto perfecto, en el que hemos invertido todo y en el que hemos puesto toda nuestra energía para lanzarlo al mercado... el mercado puede decirte que no, que no es útil... y que es bueno saberlo, pero si lo haces rápido, barato, aprendiendo y con riesgos controlados, mejor. En Silicon Valley se dice que si no te avergüenzas de la versión beta de tu producto, es que has tardado demasiado en lanzarlo. Ya vemos que las metodologías Lean y Agile, antes utilizadas en el mundo de las startups y la tecnología, hoy son la clave del éxito para muchas grandes organizaciones y no sólo desde el punto de vista tecnológico. En today´s día de la edad la vida útil de un producto es promedio, menos de 24 meses. No podemos estar 18 meses tratando de crear un plan de negocios y reconstruirlo. Tenemos que conseguir ser más ágiles y perder el miedo en el mercado. No tengas miedo de fracasar, no tengas miedo de decir que has cometido un error... es el único camino hacia el éxito.

9) Alianzas de 360 grados

En el mundo de hoy, pensar que se puede hacer todo es el gran error. Las empresas exitosas de hoy son ecosistemas que integran toda su cadena de valor. Para innovar necesitamos desarrollar alianzas exitosas, no sólo desde el punto de vista tecnológico o de construcción de productos, sino también para llegar al mercado. Los directivos de hoy en día necesitan ser capaces de liderar consorcios complejos, tienen que ir mucho más allá de liderar un equipo que se ve obligado a responder a sus pedidos debido a las condiciones contractuales. Realmente hoy tenemos que buscar generar sinergias, ganar premios y propuestas de valor que hagan que las cosas funcionen. Tenemos que integrar toda nuestra cadena de valor, no a través de contratos, sino a través de propuestas de valor que generen beneficios en todas las partes. El gestor actual debe saber cómo liderar la complejidad, creando propuestas de valor para todos sus grupos de interés que hagan que todos sigan el mismo camino.

10) Corporate Venture Builder y Digital LABs

Necesitamos crear en las organizaciones los instrumentos para que la innovación florezca. Realmente necesitamos recrear un entorno que funcione a una velocidad diferente a la interna de una organización madura, donde realmente pueda fracasar sin temor a comprometer el negocio actual, donde los equipos tengan una forma diferente de trabajar que les permita ir más rápido. Llámalos "Constructores de Empresas" o "Laboratorios Digitales". Las incubadoras y aceleradoras ya no funcionan, por la simple razón de que fueron diseñadas para llevar a un grupo de personas con ideas, acompañarlas durante 6/12 meses, darles capital, capacitación y recursos para que accedan al mercado y si tienen éxito siguen adelante y si fracasan, regresan. Pero este modelo es muy intensivo en capital y tiene algo que lo hace ineficiente, si en 6/12 meses no trabajas vuelves a casa... con todo lo que has aprendido y con todo lo que has desarrollado. Por esta razón nos gusta hablar de Venture Builder, que son lugares donde realmente quieres tener el mejor talento que puedas tener trabajando a tiempo completo para resolver retos y crear negocios. Este equipo de fuerzas especiales está creciendo y trabajando en nuevos proyectos todo el tiempo, con la tranquilidad de contar con fondos suficientes que le permiten llegar al menos hasta la validación con el mercado y la tranquilidad de poder fracasar sin afectar su continuidad.

El premio al emprendedor tiene la capacidad de atraer talento y por eso son el futuro. Los constructores de empresas tienen una gran diferencia, en comparación con los aceleradores e incubadoras... son intensivos en talento y no en capital, la capacidad de atraer y retener talento es recompensada, en comparación con el flujo de operaciones de los proyectos que recibes, por esta razón son el futuro... Los retos actuales son demasiado complejos para que un emprendedor o intra-empresario pueda responder a su primer intento, necesitamos nuevos mecanismos para seleccionar a los mejores, dar una metodología de trabajo, financiación y tranquilidad que nos ayude a generar los nuevos negocios que necesitamos. Necesitamos crear una organización paralela, un lugar de pruebas, donde se reciclen los conocimientos y se cuente con los mejores equipos enfocados a la creación de nuevas tecnologías y nuevos negocios, priorizando la inversión en talento, en lugar de la inversión en ideas y proyectos.

Quisiera concluir este artículo con una reflexión: Es mejor interrumpir que ser interrumpido. ¡Innovar!