Tuvimos la oportunidad de compartir unos minutos con el magnate de la red española para hablar sobre el emprendimiento en nuestro país.

Rodolfo

Rodolfo Carpintier es, sin duda, uno de los grandes inversores de Internet en España. Para los que no conocen al fundador de Digital Assets Deployment (DAD), incubadora de negocios relacionados con redes, apostaron por empresas poco conocidas en nuestro país como BuyVip y Tuenti.

 Se podría decir que Carpintier es un hombre de negocios con buen ojo, que optó por lo que parecía una imitación de Facebook en español y que actualmente tiene 15 millones de usuarios registrados. Ha logrado entrar en ese difícil nicho de la telefonía móvil, asociándose con Telefónica, su principal accionista.

 Ahora sabemos la razón por la que los jóvenes se acercan a él al final de sus charlas para presentar sus ideas de Start Up. Responde con una sonrisa y les da una tarjeta con su dirección de correo electrónico para asegurarles que pueden enviarle sus ideas siempre y cuando "sean páginas más cortas", pero lo suficientemente extensas para que DAD se dé cuenta si el negocio es de su interés o no.  

 Según Rodolfo Carpintier, hay ciertos parámetros que cada negocio debe seguir. En el caso de DAD, buscan emprendedores que estén convencidos de que lo que imaginan es posible hacer realidad.

 Pero, ¿no es este el objetivo de un negocio? El magnate de la red dice que no lo es. En realidad, dijo que "muy pocos" empresarios son capaces de conseguirlo y que hay muchos otros "que cuando hablas con ellos hacen este espectáculo masivo, pero cuando profundizas ves que ni siquiera creen en él".

 Es por eso que "una hoja de papel" es suficiente. Después, admite, "hay más conversaciones", aunque lo más importante es que los jóvenes empresarios puedan explicar claramente por qué su negocio es diferente a todos los demás.

 La razón detrás de este requisito es obvia. Internet es un sector en constante movimiento en el que existe una "feroz competencia de personas que quieren copiarte", por lo que tienes que ser rápido para modificar tu modelo de negocio cuando y donde sea necesario.  

 "Sólo porque tengas éxito hoy no significa que lo tendrás mañana. Hay que despertarse todos los días con la preocupación de que alguien esté creando algo que haga que su producto sea obsoleto", asegura.

 En el caso de España no basta con estar alerta, como en nuestro país, según Rodolfo Carpintier, hay que hacer el doble de trabajo para entrar en el sector. Perdimos mucho tiempo al principio, durante los años 90, cuando países como los Estados Unidos ya se estaban desarrollando y creciendo en línea.

 Después, cuando la burbuja estalló en 2000 con puntocom, muchas empresas perdieron dinero: "Esto hizo que los ricos de España no invirtieran en el sector", un hecho que ha retrasado al país "cinco o seis años" en relación con Europa "y diez años" en relación con Estados Unidos.

 Sin embargo, actualmente se siente optimista sobre la realidad empresarial, ya que ha crecido mucho en los últimos dos años. Pero, ¿somos capaces de superar la aparición tardía de las empresas españolas en línea? Carpintier sabe la respuesta "sí, con la tecnología adecuada y con cosas que no existen en los Estados Unidos".

 Tienes las llaves, ahora todo lo que necesitas es el producto, ¿a qué esperas?